Este pasado fin de semana, Paco Bazán fue invitado al programa ‘Sábado con Andrés’, en donde rompió en llanto al confesar que teme perder el voto de castidad que tiene desde hace dos años. Conoce todos los detalles.
La revelación de Paco Bazán
Durante la última edición del programa ‘Sábado con Andrés’, Paco Bazán fue invitado y comentó sobre la situación con su esposa Janice, por lo que en un momento no pudo evitar quebrarse al confesar que teme perder su voto de castidad.
Según lo que mencionó Paco Bazán, optó por el voto de castidad para continuar comulgando en la Iglesia, pero ya han pasado dos años desde aquella promesa y tiene miedo que su “humanidad” lo haga fallar.
“Temo que me gane mi humanidad. No ha sido fácil, hay mucho sufrimiento en todos, en los hijos, en la familia, en el entorno. Humanamente, uno también se cansa. De momento, yo he respetado la voluntad de Dios que, de acuerdo a nuestra doctrina católica, tengo una esposa espiritual y no estoy dispuesto a dejar de comulgar”, resaltó visiblemente afligido.
Asimismo, Paco Bazán compartió la complejidad que tiene para mantenerse firme en sus creencias religiosas, en medio de las “tentaciones” que existen:
“Cuando uno pelea por una restauración familiar, es con uno mismo. Las parejas tienen su libre albedrío y nadie puede obligar al otro a amar, pero cuando uno quiere ser fiel a un pacto de sangre, tienes dos caminos: o eres fiel al pacto, a lo invisible; o te entregas al mundo y disfrutas de los placeres, eres feliz, es tan deliciosa la carne”.
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¿Qué más resaltó sobre el tema?
Con algunas lágrimas en los ojos, Paco Bazán narró acerca de su batalla espiritual y cómo ha enfrentado su voto de castidad en los últimos años.
“Yo tomé una decisión, conmigo y con mi batalla espiritual. Pero sí tengo temor como todo tiene un límite. Estoy cansado, agobiado. He sido fiel al sacramento, han sido dos años en castidad, lo prometo”, agregó.
Fue ahí donde Andrés Hurtado, le cuestionó a Paco Bazán por qué estaba llorando, a lo que el conductor deportivo señaló que el proceso de separación ha sido doloroso.
“Hay mucho sufrimiento en todos, hablando del espacio personal, hay mucho sufrimiento en la familia, los hijos, en el entorno y humanamente uno se cansa. Todos tienen un límite”, concluyó.